Si un cambio de gafas mejora tu vista, imagina cómo un cambio de pensamientos puede mejorar tu vida
¿Lo puedes creer? Pues créetelo. Para ello hay que aprender, comprender y analizar tu mente (consciente y subconsciente). Tu mente consciente es donde puedes llegar a generar pensamiento, trazar planes, donde ocurre y transcurre toda la lógica. Es la que dirige todo, absolutamente todo, pero más allá de eso, hace el trabajo importante: dirige y ejecuta.
Por el otro lado está nuestra mente subconsciente. Para controlarla necesitas varias cosas, entre ellas mucha fuerza de voluntad. Esto ocurre cuando entrenamos nuestra mente para que dirija nuestro subconsciente. Es un cambio vital, supone atención plena y fé en el proceso de cambio.
Cuando aprendemos a manejar todo esto, puedes llegar a hacer cosas increíbles. Claro, es un gran desafío, pero una vez dominado, podrás hacer grandes cosas con tu vida y podrás alcanzar lo que te propones.
No somos conscientes del poder de la mente subconsciente.
Tu mente subconsciente es la parte de la que no eres consciente, pero así a lo tonto, es la responsable que realiza el 95 al 99 por ciento de todo lo que piensas, haces y dices. El subconsciente asegura que tu corazón siga latiendo, tus pulmones continúen respirando, tus músculos recuerden como caminar y un largo etcétera. El subconsciente es como el piloto automático por así decirlo, se ocupa de hábitos, reacciones, acciones que ocurren a un nivel subconsciente y no estamos conscientes de esto. Gran poder tiene pues ¿no?
El subconsciente puede llegar a boicotear varias cosas en tu vida, ya que algunos comportamientos y pensamientos negativos se generan en automático en tu subconsciente, lo cual te estanca, te inhabilita la parte consciente. Los hábitos son acciones que son sumamente repetitivas y muchas veces no notamos que ya lo hacemos en automático: acciones y decisiones en nuestra vida las hacemos en automático o porque estamos acostumbrados a ellas, ni pensamos, ni analizamos, hacemos. Punto.
El subconsciente nos controla
Ahí radica el problema, vivimos toda nuestra vida sin decidir claramente sobre qué hacer con nuestra vida o quiénes queremos ser. Ahora sí, realmente tienes el poder de hacer cosas inimaginables lo único que te detiene es tu mente. Quitarle el poder a tu subconsciente es crucial para tu presente y tu futuro. Todo lo que te propongas, puedes hacerlo, todo, no lo dudes.
¿Cómo? Cambiando tus ideas, estando atento a tus acciones. Pero hay que hacerlo, esforzándote, dedicando tiempo a analizarte, poniendo en práctica todo lo contrario a lo que haces habitualmente. Tus pensamientos no te definen, desvincúlate por completo de esta idea, porque es una verdad poderosa, es un gran punto de partida a tener en cuenta.
La idea que tenemos de nosotros mismos, está fabricada por ese diálogo interno que tenemos constantemente, nos repetimos una idea tantas veces que la acabamos creyendo. Creemos que es una verdad absoluta, y no, no lo es.
Cambia tus pensamientos para cambiar tu vida
Cuesta, la mismísima vida, lo sé por experiencia propia. Te resistirás a la idea de perder tu identidad, renunciar a tu YO. Pero créeme que eso no sucederá, porque al cuestionarte no te pierdes, te estás encontrando.
Cuando comienzas a comprender que eres algo mucho más grande que tus pensamientos, comienzas a entender que tienes el poder de elegir qué pensamientos pensarás y, en última instancia, comenzarás a reprogramar tu mente subconsciente, y, ganarás una nueva vida, fabricarás una nueva versión mejorada, la PRO de ti mismo, y ya nada volverá a ser lo mismo. Doy fe.
¿Y tú te atreves a dar el paso? ¿Cambias?
